Por: Martrin Gutierrez.
La Villa Olímpica de Carabobo emblema del deporte regional, nacional y en su momento internacional se estreno durante los juegos Suramericanos de 1994. La planta física que en otrora albergó a cerca de 1.600 atletas provenientes de Las Antillas Neerlandesas, Argentina, Aruba, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Panamá Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela, posterior a la justa suramericana se convirtió en un centro de concentración de atletas de alta competencia de los seleccionados nacionales. «Recinto que hospedó la crema nata de la juventud venezolana, es decir los mejores deportistas del país incluso en revolución» según refiere la comunidad deportiva y demás conocedores de la situación actual por la que atraviesa el centro.
«La Villa Olímpica fue una majestuosa obra que cumplía con creces la función para la cual fue construida. Ya adentrados en los años de revolución, fue tanta la admiración de su belleza por parte de los chavistas que la querían mostrar como emblema de la revolución, y cada vez más la utilizaban para cualquier cosa menos para el deporte, incluso llegaron a pintarla de rojo, utilizaban sus bellas instalaciones, que estaban a la altura de cualquier hotel de lujo, para sus actos politiqueros. Utilizaban su teatro para reuniones sociales y políticas del chavismo, elegantes de traje y corbata y las mujeres con sus vestidos de luces se paseaban frente a los atletas que en ese momento no tenían ni papel higiénico en las habitaciones. Se realizaban cenas y banquetes en la misma instalación en donde los atletas no tenían ni servicio de comedor, en fin se hicieron protagonistas de los actos que en su discurso revolucionario tanto criticaban, ya en febrero del 2007 esta insostenible situación desencadenó una manifestación por parte de los atletas que terminó con la policía de Carabobo cayéndole a disparos a los atletas del estado Carabobo terminando varios heridos de gravedad». Es tanto el amor y la envidia que enciende esta majestuosa obra en el gobierno revolucionario que terminó destruyéndose casi por completo.
Recuerdo, con mucho respeto y afecto, a quienes valientemente me acompañaron en la primera línea, dando la cara y poniendo el pecho para detener tanta injusticia, por algo son ustedes atletas de Carabobo de los mejores del país, esa valentía y entrega por lo que aman los hicieron durante tantos años protagonistas de las páginas del éxito del deporte nacional; mis respetos para las selecciones estadales de Carabobo del año 2007 en especial a los valientes atletas de las disciplinas de Wushu, Karate, Kempo, Judo, Atletismo, TaeKwondo, Gimnasia, Halterofilia, Tiro, Tiro con arco, Waterpolo Femenino, atletas paraolímpicos, entrenadores y trabajadores de «La Villa», fue un honor salir al frente junto a ustedes, mis respetos.Ya han pasado más de 13 años desde aquellos duros días, en donde fuimos superados y aplastados por la represión policial, muchos entre los que me incluyo fuimos posteriormente amenazados de muerte incluso por autoridades de las instituciones deportivas como el señor Ermagoras Mangle.
Al final la devastación continuada se abrió paso, «La Villa» se utilizó para actos políticos en su teatro, se hospedaron grupos llamados colectivos, la tomaron como hotel de grupos politiqueros, y ahora es utilizada como aliviadero de cuarentena por el colorido gobernador de Carabobo, que también vale decir no es el primer gobernador colorido que ha tenido la entidad, como si de alguna manera el pueblo carabobeño estuviese bajo algún tipo de maldición, hemos pasado por un cerdo que eructa en televisión como preámbulo de lo que sería su desastrosa gestión y llegamos a uno que en su alucinaciones de batman pues de hecho convirtió a Carabobo en su soñada ciudad caótica. También han pasado muchos años desde que esta gran estructura, alojó a estrellas deportivas de gran investidura como Francisco “El Tiburón” Sánchez o Alberts Subirast entre otros más, ya hoy se muestra en completa ruina. Un aproximado de 460 habitaciones colapsadas en su totalidad por la falta de manteniendo y sobre todo disposición de los presidentes de la Institución, quienes en los últimos tres periodos se han encargado de acabar con la hermosa Villa Olímpica, ubicada en la Avenida Salvador Feo La Cruz cruce con Avenida Universidad del municipio Naguanagua estado Carabobo.
Es de referir que desde la gestión de Rafael Palacios, otrora ex presidente de Fundadeporte (durante el gobierno de Henrique Fernando Salas) esta instalación deportiva no ha recibido el respectivo mantenimiento, necesario para albergar atletas que se hospedaban en sus cómodas y confortables habitaciones de calidad, deportistas que solicitaban el alojamiento por sus muchas virtudes como la ubicación geográfica y segundo por estar cerca de lo que fue el “Complejo Deportivo Bicentenario” otro espacio destruido por la mala administración y falta de gerencia del ente supuestamente encargado de regir el deporte en la región carabobeña.
De Centro Olímpico a Centro de Aislamiento
La Villa Olímpica, hoy convertida en un Centro de Aislamiento Sanitario contra el Covid-19 para atender a connacionales que llegan de vuelta al país, está siendo gerenciada por el Instituto Carabobeño para la Salud (InSalud) y demás organismos competentes en la materia para controlar el Coronavirus. Una fuente anónima ligada a Fundadeporte, explicó que una vez llegados los venezolanos procedentes de la frontera a Carabobo, los mismos son aislados durante 14 días para su respectivo monitoreo, y solamente pueden ingresar al recinto personal adscritos a estas instancias, nada de deportistas, entrenadores o dirigentes deportivos pueden estar en los espacios que les corresponde. El mundo al revés, ahora la gente del deporte tiene prohibido el paso a lo que fue su casa.
Muchos atletas han mostrado su preocupación, por el estado deplorable en el cual se encuentra La Villa Olímpica de Carabobo, la cual llegó a tener uno de los mejores comedores del país, valdria la pena recordárle a los gobernantes que muy cerca está la 41° Brigada Blindada, que cuenta con espacios más amplios y de mayor seguridad a la hora de controlar a las personas que entran y salen de la región.
En el 2013 quedaron atrás 20 años de triunfos del deporte en Carabobo, luego de perder los Juegos Nacionales. Queda poco tiempo, pero pienso que aún se pueden tomar medidas destinadas a regresarles la alegría a los atletas vinotinto, “tierra de campeones” queda tiempo para reconstruir los escenarios deportivos de Carabobo antes que la “langosta roja” se coma cada rincón deportivo en la entidad, pero debemos dar la pelea, y esta vez debemos ganarla.
Por: Martrin Gutierrez.